¿A que te suena la palabra Stradivarius? Seguramente lo primero que se te viene a la mente es una marca de ropa. Pero en realidad el nombre de esta cadena de ropa se debe a una prestigiosa marca de violines. Todo comienza en Creomona, Italia en el año 1644 con el nacimiento de Antonio Stradivari. La familia Stradivari era pobre así que decidieron meter a su hijo como aprendiz en el taller de un reputado artesano de instrumentos de cuerda llamado Niccolò Amati. Pronto, Antonio sorprendió a su maestro con su gran capacidad en el oficio aportando incluso sus propias innovaciones respecto a los trabajos de Amati. De esta manera, tras formarse en otros tantos talleres, en 1680 Stradivari abrió su propio negocio en Cremona. En estos tiempos, la música barroca estaba en apogeo lo que permitió que su negocio prosperara. Poco a poco sus violines comenzaron a resonar entre el panorama recibiendo recurrentes encargos de grandes violinistas como Giovanni Battista Viott